Los clientes de Almazaras de la Subbética pueden disponer para la próxima campaña de un novedoso sistema de trazabilidad a través de tecnología blockchain. En un importante paso para la transformación digital de sus procesos, Almazaras de la Subbética, que ya aplicaba sistemas de trazabilidad en su proceso productivo, ha aplicado la tecnología blockchain para hacer que el sistema de trazabilidad tradicional sea inmutable y transparente para el usuario. Como declara su Presidente, “es una demanda del cliente tener acceso a los sistemas de trazabilidad internos que ya teníamos, y que mediante tecnología blockchain se pueden transparentar. Con este sistema contamos en cada botella el origen de la aceituna desde que llega a la fábrica hasta que se embotella, quedando todo en un sistema siendo accesible para el cliente final, y además, inmutable”.
Este novedoso sistema ha sido desarrollado por la empresa cordobesa NoSoloSoftware, que ha sido capaz, en colaboración con la Escuela de Ingenieros Agrónomos de la Universidad de Córdoba, de hacer un proyecto piloto aplicando tecnología blockchain a los sistemas de trazabilidad of line. Según comenta Pedro Navajas, socio fundador de la empresa “hemos entendido la necesidad del cliente con la ayuda de un alumno de Fin de Máster en Digital Agri, y hemos aplicado tecnología blockchain a un caso concreto, la trazabilidad alimentaria, aunque esta tecnología es aplicable a otros sistemas de trazabilidad u a otros proyectos, como puede ser el caso de las criptomonedas. Dossier de prensa | Agrotech blockchain NoSoloSoftware tiene la capacidad de integrar sistemas en funcionamiento, aplicando nuevas tecnologías que conllevan soluciones más eficientes respondiendo a las demandas del cliente”.
El proyecto ha sido financiado por el GDR de la Subbética en una clara apuesta por la transformación digital de este entorno rural, como destaca su Presidente Juan Pérez “hemos puesto en marcha este proyecto piloto con una clara vocación de hacer de la Subbética un auténtico territorio blockchain. Creemos que los consumidores finales deben conocer las bondades de los productos que hacemos, en el caso del aceite saber que gracias a este cultivo fijamos gente al territorio, aplicamos técnicas de cultivo que favorecen el medio ambiente, o creamos empleo en el mundo rural, son cosas que no todo el mundo hace, y es necesario darlas a conocer y en este caso la tecnología nos lo permite”.
Este proyecto puede servir para que otros territorios y productos usen la tecnología no como un fin en sí mismo, sino como una forma de aumentar el valor del producto o de hacer el sistema productivo más eficiente.